miércoles, 15 de agosto de 2007

Swami Shivapremananda


Swami Shivapremananda, discípulo directo del legendario Swami Sivananda con quien estudio desde 1949 y 1961 en Rishkesh, India, se graduó en la Forest Vedanta Academy y recibió grado de yogacharya o maestro de yoga. Fundó en la decada de los 60 la tercera gran escuela de yoga de Uruguay. El Centro Sivananda Yoga Vedanta cuya sede se encuentra en la sede de la calle Uruguay. Swami Shivapremananda ha sido un profundo conocedor de yoga y difusor del mismo en Uruguay, Argentina y Chile. Ha sabido adaptar el yoga vedanta hinduista a la sociedad uruguaya. Es junto a Swami Asuri Kapila, Swami Sevannada y Swami Maitreyananda uno de los grandes maestros que llegaron a nuestro país para enseñar el yoga.
En su escuela se han formado varios profesores de yoga que luego han formado otras instituciones incluso con el nombre de Sivananda. La escuela difunde el yoga vedanta hinduista.

1 comentario:

Mary Isabel dijo...

En la dècada del 80, casi 90, me encontraba en una situaciòn anìmica, delicada. Una persona conocida, me comentò que enfrentaba su vida y sus innumerables inconvenientes, personales, acudiendo a clases de Yoga. Habìa escuchado de esa filosofìa, sin embargo, nunca habìa tenido la oportunidad de encontrarme en forma directa, con la misma. Acudì al Centro Yoga, de la calle Uruguay, en Montevideo; y fue para mì , una experiencia maravillosa. Comencè a restablecer mi caràcter, a fortalecer mi interior, nuevamente, a ver las cosas y la vida, de modo màs claro, nìtido y decididamente comencè a iluminar mi alma. Una experiencia motivadora, e inmensamente pasiva, reconfortable, para el espìritu y el alma. Fisicamente, tambièn me energicè. Las personas que acuden, comparten, el estado positivo y por ende, èste se trasmite naturalmente, a los demàs seres vivos, y màs...
Hoy, nuevamente, estoy proyectando reintegrarme a las clases, y compartir en esta nueva etapa de mi vida, las innovaciones que pueda recibir. Desde esa primera vez que asistiera, mi vida, la perspectiva, cambiò en un sentido maravilloso. Al suspender mi asistencia a las clases, sinembargo, jamàs abandonè las pràcticas aprendidas y aprehendidas. Cada vez que me siento,ven situaciones lìmites, practico yoga. Sòlo quiènes lo hacen, pueden entender lo que expreso...